La pandemia dispara el empeño de joyas en el Monte de Piedad vigués

14/jun./21

La institución social de Afundación concedió 3.500 préstamos el año pasado por valor de 1 millón de euros

La crisis derivada de la pandemia llenó el Monte de Piedad que hay en Vigo -gestionado por Afundación- con numerosas personas con problemas económicos en busca de liquidez. La fórmula es sencilla: la institución concede préstamos rápidos avalados por joyas de oro que el cliente empeña y que en la inmensa mayoría de los casos se recuperan. La institución realizó el año pasado 3.500 operaciones, cifra similar al ejercicio anterior, por valor de 1 millón de euros y el importe medio de las operaciónes aumentó hasta los 700 euros porque el precio del oro se disparó en 2020 (activo refugio durante la crisis), de ahí que la tasación de los bienes fuera al alza durante la pandemia y los clientes pudieron recibir más dinero por el depósito de sus joyas de las que tienen que ser sus propietarios. Entre ellas hay pulseras, sortijas, piezas con brillantes y esmeraladas, cordones, monedas de oro y relojes. “Tienen un gran valor sentimental y la gran mayoría las recuperan”, explica Carlota Sánchez-Montaña Puga, coordinadora adjunta del área de Educación Superior de Afundación acerca de esta fórmula de financiación a base de créditos de carácter social. "Suponen un refugio para muchas personas con dificultades porque saben que lo pueden recuperar”, indica.

De 50 a 3.000 euros al día

El Monte de Piedad vigués cuenta con una cartera de clientes estable, muchos de hace años, la gran mayoría son mujeres (el 80%) y es una herramienta empleada sobre todo por el colectivo de más edad. “Más del 70% de nuestros clientes sobrepasan los 50 años y el colectivo de más de 65 representa cerca del 40% de nuestra cartera. La crisis trajo gente nueva al Monte, pero la mayoría son clientes de toda la vida", explican desde Afundación. De hecho, son muchos los que acuden con la misma joya varias veces porque la inmensa mayoría las recuperan: la tasa de morosidad es bajísima, ronda el 3% en estos momentos.

La pandemia dispara el empeño de joyas en el Monte de Piedad vigués

Un equipo de gemólogos se encarga de tasar la joya en función de la cotización actual del oro de 18 kilates y el préstamo que se concede es del 75% de la tasación fijada. El importe mínimo que concede en estos momentos el Monte vigués es de 50 euros y el máximo de 3.000 euros al día y el capital máximo prestado a una misma persona está ahora en 8.000 euros. Se ofrece la posibilidad de una retasación en el caso de que el cliente no pudiera satisfacer la cuantía del crédito y, llegado el caso, las joyas salen a subasta pública previo aviso a los propietarios que tienen derecho preferente de recuperación hasta 24 horas de la exposición de los lotes.

El Monte de Piedad de Afundación está ubicado en la calle Velázquez Moreno, donde el personal atiende bajo cita previa desde que estalló la pandemia y por el momento seguirá manteniendo esta fórmula de atención al público. Realiza una subasta al año y la próxima está fijada para el último trimestre.

Único en Galicia y uno de los pocos que quedan en España

El Monte de Piedad vigués es el único que hay en Galicia y uno de los pocos en funcionamiento en España. Tiene su origen en 1880 procedente de la antigua Caixavigo y fue promovido por el alcalde de Vigo por aquel entonces, el Conde de Torrecedeira. En la actualidad está ubicado en la calle Velázquez Moreno, antes estuvo en la sede central de Abanca en García Barbón y en sus inicios en una habitación de la cárcel de la ciudad y en la Casa Consistorial hasta 1923. Por entonces se empeñaban prendas de ropa, pieles, alhajas o máquinas de coser. Hoy sólo joyas de oro. La marca Monte de Piedad data de 1702 y hoy hay apenas una decena en España, fruto de la reestructuración bancaria y la desaparición de muchas cajas de ahorros. Como la extinta Caixavigo que promovió dentro de su obra social esta institución que en la actualidad se mantiene en la ciudad de la mano de Afundación Abanca.

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