Cómo empezar a cuidar tu piel a los 30 para ralentizar la aparición de arrugas según vayas cumpliendo años

Tu cara no se ve tan bien como antes. Has llegado a los 30 o los has pasado y en tu cara empiezan a aparecer líneas de expresión, cierta flacidez, ojeras o algunas patas de gallo.

En parte esto puede deberse a que a partir de esta edad la vida puede que deje de ser tan divertida y las obligaciones y responsabilidades se dejan notar en tu piel. También comienzan a acumularse los efectos negativos de la contaminación y el sol en tu rostro.

Por otro lado, a medida que cumples años tu piel también envejece y a partir de ahora comenzaá a ralentizar poco a poco su capacidad de renovación. La síntesis del colágeno también se ve disminuida con los años.

Aunque lo recomendable que es comiences a cuidar tu piel cuanto antes de forma preventiva. Tranquilo, los 30 no es demasiado tarde para combatir las arrugas y aún puedes hacer mucho por minimizar el impacto del envejecimiento en tu rostro a medida que cumplas años. Solo tienes que empezar a poner en práctica los siguientes consejos.

Empieza por incluir el protector solar en tu rutina de cuidado manera diaria

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Limitar la crema solar a los días de verano de piscina o playa es uno de los grandes errores que se cometen a la hora de cuidar la piel.

Pues uno de los factores externos que más envejece esta parte de tu cuerpo es el sol. La exposición excesiva a esta luz puede dañar significativamente la piel, no solo causando quemaduras y afecciones graves como el melanoma, también acelerando el envejecimiento y la aparición de arrugas.

"En todas las edades se debe usar fotoprotección solar diaria con FPS 50", explica a Business Insider España la doctora Elena de las Heras, dermatóloga del Servicio de Dermatología del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid.

Como remarca la especialista "ahora la novedad es que los fotoprotectores incluyan agentes antiedad como péptidos o vitamina C y despigmentantes como niacinamida, rucinol, tranexámico, etc.", lo que hará el cuidado de tu rostro sea aún más completo si te preocupan arrugas y flacidez.

Limpia tu cara tanto por el día como por la noche

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Cómo empezar a cuidar tu piel a los 30 para ralentizar la aparición de arrugas según vayas cumpliendo años

Otro ritual de belleza que no debes olvidar a ninguna edad es limpiar tu piel tanto por las mañanas como antes de irte a la cama.

Puedes utilizar desmaquillantes o limpiadores, pero lo más efectivo, simplemente lavarte la cara con agua y jabón.

Con ello te asegurarás de eliminar de tu piel restos de suciedad que pueden impedir que sus funciones de protección y renovación se hagan correctamente.

Comienza a familiarizarte con el ácido glicólico

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"De todos los agentes antiedad, la estrella para mí es el ácido glicólico", comenta la dermatóloga. Se trata de un alfahidroxiácido, derivado de la caña de azúcar, "que actúa tanto a nivel epidérmico como dérmico".

Sus resultados sobre la piel, según explica De las Heras, son múltiples. En torno a 4 o 5 días, "la piel se vuelve más luminosa debido a que acelera la renovación epidérmica. A largo plazo, se ha demostrado en estudios con biopsias de piel, que mejora la dermis aumentando los mucopolisacáridos. Este último efecto es muy interesante porque implica la mejora en la textura y consistencia de la piel".

Asimismo tiene acción hidratante, "aunque según la formulación (gel, crema...) la sensación cosmética de hidratación varía", puntualiza.

Para cuidar la piel a partir de los 30 años "se debe usar ácido glicólico del 8 al 20%, de noche", aconseja. Aunque lo habitual es comenzar con concentraciones del 5-8%, "y si se tolera bien, incrementar la dosis".

No obstante, si vas a empezar ahora un tratamiento antiedad con ácido, debes tener en cuenta que la acción exfoliante de este componente hace que tu piel se pueda volver más sensible a los rayos UV, por lo que cuidado con el sol en verano.

Frente a esto la doctora aconseja que durante esta época del año puede ser conveniente "reducir su aplicación a una vez por la noche" y asegurarte siempre de aplicarte "un protector alto por la mañana".

Combínalo con otros agentes interesantes como retinol o vitaminas C y E

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Por supuesto, hay otros agentes que pueden hacer mucho por tu piel si los incorporas en tu tratamiento facial.

Por ejemplo la vitamina C o ácido ascórbico es un cofactor de diversas enzimas que además desarrolla un papel clave en la síntesis de colágeno, como recuerda De las Heras.

"La vitamina C también actúa como potente antioxidante, neutralizando radicales libres que inducen el envejecimiento de la piel y regenerando la vitamina E, que en forma de linoleato, está indicada para restaurar el manto hidrolipidico", añade.

La vitamina C se oxida con facilidad, "por lo que sus formulaciones cosméticas para ser estables deben contener las formas levógiras de la vitamina, a concentraciones entre 5 y 10%", matiza la experta.

De manera específica para pieles secas o envejecidas por el sol la dermatóloga recomienda " ácido glicólico al 8% con vitaminas C y E" lo que aumenta su poder antioxidante. "También es interesante la combinación de ácido glicolico al 25% y retinol así como la de glicólico al 4% con ácido retinoico 0,002%". —El retinol es otro de los elementos que te ayudará en la producción de colágeno a medida que tu cuerpo ralentiza este proceso—.

Mientras que la combinación de ácido glicólico con betahidroxiácidos como el ácido salicílico "es muy útil en pieles mixtas, seborreicas o con acné. Lo ideal sería un excipiente en gel con ácido glicólico al 15% y ácido salicílico al 2%".

Considera un peeling químico

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Los peelings son técnicas empleadas por los dermatólogos para mejorar el aspecto cutáneo. Consisten en la aplicación de una sustancia química sobre la piel, pudiendo emplearse diferentes tipos de soluciones. Y según De las Heras, los 30 años son una buena edad para empezar a considerarlos cuando se busca mejorar el estado de la piel.

¿Qué puedes conseguir con los peelings? "Potenciar los efectos de los productos con ácido glicólico que usamos a diario, produciendo a corto plazo una renovación epidérmica de forma rápida y a largo plazo, una mejora de la textura cutánea. Se puede utilizar tanto para pieles mixtas o acneicas, como en pieles secas y con manchas solares", evidencia.

Si vas a considerarlos, la dermatóloga recomienda dejar pasar el verano, y esperar a octubre, "una buena época", para minimizar el riesgo de irritación por el sol.

Si te preguntas qué es importante en la preparación previa al peeling, siguiendo las indicaciones de la doctora,evita en los días previos limpiezas faciales, depilación o friccionarse la piel "ya que esto podría aumentar los efectos indeseables por una mayor penetración del ácido en la piel".

Además es conveniente que la frecuencia de aplicación de los productos con ácido glicólico sea de dos veces al día, para que la piel se vaya adaptando y esté preparada para el pH o acidez más bajo del peeling (que puede ser de 0,6).

En los dos días posteriores, deberás suspender el ácido glicólico y aplicar una crema regeneradora. "Eso sí, es muy importante no exponerse al sol de forma directa en la semana posterior. Tampoco conviene maquillarse el mismo día, ni frotaros la cara por el riesgo de cicatriz".

Por supuesto asegúrate de hidratar tu piel

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A partir de los 30 años es posible que se de una desaceleración de la renovación de la piel, lo que puede traducirse en mayor dificultades para mantener el correcto nivel de hidratación de forma natural.

“Se necesita más tiempo para que la capa superior de la piel se desprenda, dando una calidad más opaca y seca. Además, la producción de factores hidratantes en la piel como el ácido hialurónico se ralentiza y aumenta la degradación", explica a SELF Melissa Kanchanapoomi Levin, dermatóloga e instructora clínica en NYU Langone y Mount Sinai (EEUU).

Para combatir estos efectos, Levin recomienda incorporar un producto exfoliante con alfa hidroxiácido (glicólico, láctico, cítrico, etc.) en tu rutina semanal a los 30 años para ayudar con la renovación celular.

Y para combatir la sequedad, que puede verse pronunciada por el efecto exfoliante, asegúrate de restaurar la barrera de humedad de la piel con una crema hidratante.