Todo lo que necesitas saber para cuidar un tatuaje

Hacerse un tatuaje es la parte fácil del proceso, pero cuidarlo es donde comienza el verdadero trabajo. Una vez que la aguja se despega de la piel, la tinta se asienta y ese hormigueo adormecedor se desvanece, es hora de llegar a casa y empezar a cuidar tu tatuaje.

Al igual que los piercings, un tatuaje requiere su propia rutina de cuidados hasta que termina de cicatrizar y una vez cicatrizado. Tanto si eres un aficionado total a los tatuajes, o si es el primero que te haces, necesitas saber exactamente qué productos comprar para que cure.

Normalmente, el tatuador dará una lista de instrucciones para asegurarse de que su trabajo quede perfecto y tengas ganas de repetir. No es complicado, solo requiere acciones como usar limpiadores sin fragancia, lociones suaves y cremas hidratantes para que la tinta no se decolore y no se infecte la zona.

¿CUÁNTO TIEMPO SE TARDA EN CURAR UN TATUAJE NUEVO?

La curación del tatuaje depende completamente de cada cuerpo, si bien lo habitual es que tarde entre uno y dos meses, y en algunos casos un poco más.

En dos o tres semanas notarás que el tatuaje ha mejorado mucho, dependiendo de su tamaño, tinta, profundidad o densidad, pero la piel puede tardar seis semanas o más en volver a ser como estaba antes del tatuaje.

¿EXISTE UNA RUTINA DIARIA DE CUIDADO DE LA PIEL QUE SE DEBA SEGUIR PARA CUIDAR UN TATUAJE CURATIVO?

Todo lo que necesitas saber para cuidar un tatuaje

Mantener la higiene es clave. Aproximadamente de tres a cuatro horas después de salir del estudio de tatuajes, hay que quitar la envoltura de plástico, limpiarlo suavemente con agua y jabón y dejar que seque al aire, evitando las toallas o los pañuelos de papel.

Usar un jabón adecuado es imprescindible para la correcta cicatrización. Tattoo Gel de Dersia es un jabón neutro para pieles sensibles, especial para ayudar a cicatrizar ayudará a la cicatrización gracias a las microalgas naturales en su formulación.

Una vez seco hay que aplicar una capa delgada de Tattoo Cream de Dersia, con propiedades humectantes, sin fragancia e incoloro y volver a envolver suavemente el tatuaje con papel film transparente asegurándote de que no quede demasiado apretado.

Debes realizar este procedimiento de tres a cuatro veces al día durante tres días, después de lo cual simplemente debes hidratar el tatuaje cada dos horas durante al menos un mes.

Un tatuaje en proceso de curación debe tratarse como una herida abierta. Es normal que se forme una costra en el proceso y que la piel seca se desprenda. Si observas ampollas, sientes dolor o enrojecimiento alrededor de la zona durante más de 24 horas o notas que supura pus después hacerlo, consulta a tu tatuador.

Recuerda que tras hacerte un tatuaje puedes hacer vida normal, aunque debes evitar realizar actividades como nadar, tomar el sol, depilarte con cera o afeitarte al menos durante veinte a treinta días.

Porque tú eres lo más importante... Estetic.es

Te recomendamos:

Injerto de cejas: la alternativa más viable frente al tatuaje

Así debes cuidar tu piel según tu edad