No más plástico: bolsas de maíz para cuidar el medio ambiente

Una nueva alternativa de empaquecompostable y vegetal.Foto: Cortesía

En el 2018, Camilo Estrada vio que en Europa estaban produciendo bolsas a partir del PLA (ácido poli láctico extraído principalmente del almidón del maíz), y quiso traer la iniciativa al mercado colombiano. Se asoció con su hermano e inmediatamente contactaron a los productores de este material para el envío de muestras, y aplicarlo a su idea de negocio. Así fue como empezó a materializarse el emprendimiento que hoy en día está preservando el medio ambiente.

En 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos los hermanos Estrada nos cuentan cómo nació esta nueva alternativa de empaque compostable y vegetal producto del maíz colombiano, y cómo han logrado concientizar a las personas del uso responsable de estas bolsas.

1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?

Somos 2 hermanos. Camilo Estrada, negociador internacional (36 años) y Sebastián Estrada, administrador de empresas (38 años).

2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?

Mi idea fue crear bolsas compostables a partir de un biopolímero de origen vegetal que se extrae del maíz. La marca se empezó a pensar en 2018 pero salió al mercado en 2019.

3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?

Aprovechamos experiencia, conocimiento e infraestructura de nuestra empresa familiar que lleva décadas elaborando empaques flexibles (bolsas), y con el apoyo de comunicadores de marca (trabajo que tomó meses) logramos hacerla realidad.

4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?

Contamos con todo el apoyo de nuestra empresa familiar y su excelente historial crediticio con bancos y proveedores para poder materializarla.

Si está buscando más historias de emprendimientos, sus creadores y creadoras están aquí, en Emprendimiento y liderazgo de El Espectador.

5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?

No más plástico: bolsas de maíz para cuidar el medio ambiente

Estamos dando una alternativa de empaque flexibles (bolsas) con un impacto ambiental mucho menor al del plástico o papel. La personalización de estas bolsas nos ha permitido llegar a pequeños emprendimientos y grandes empresas que pretenden empacar sus productos de una manera completamente distinta, nueva y vegetal.

6. ¿Soy feliz?

No solo somos felices, sino que nos sentimos demasiado orgullos y agradecidos con nuestro equipo de trabajo, clientes y proveedores.

7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?

Siempre estamos abiertos a las nuevas y buenas propuestas.

8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?

Fue difícil negociar muestras y pruebas con el proveedor en Europa, y más complejo todavía que creyeran en un producto más costoso que las bolsas plásticas tradicionales.

9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?

El sueño se cumple día a día. Nos falta crecer mucho y lograr que las bolsas de Mahíz sean el producto líder en el mercado de los empaques flexibles.

Puede interesarle este emprendimiento: Ella logró hacer empresa con lo que era basura para otros

10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?

Deseamos exportar, generar nuestro propio ecommerce y abarcar el mercado de manera más global.

11. ¿Mi emprendimiento es escalable?

Sí lo es. Una de nuestras metas es buscar la internacionalización de la marca y el producto.

12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?

No lo haríamos. Es algo que por código de gobierno y familia, no tenemos contemplado.

13. ¿Qué no volvería a hacer?

Creer en proyectos gigantescos que prometen mucho pero no tienen base o argumento para lograrlos.

Visite la sección de Emprendimiento y Liderazgo de El Espectador

14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?

El uso de estas materias primas en países europeos y asiáticos. El más grande emprendimiento de este tipo es de Indonesia. Se llaman AvaniEco

15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?

Al momento de ofrecer el producto a clientes tradicionales de la empresa, recibimos una negativa debido al precio porque es mucho más elevado que el plástico tradicional, ahí pensamos que iba a ser el fin de la idea.

16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?

Nos apoya nuestra familia, conocidos,seguidores y clientes. Ellos se convirtieron en nuestra comunidad.

17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?

Con seguridad será así porque reducir el impacto ambiental está pensado para un futuro y para las nuevas generaciones, esto con el fin de alargar lo que más podamos la vida de nuestro planeta, el mismo que ya está dañado con el fallido comportamiento humano.

Conozca esta historia: Felica letras, el emprendimiento que le hace una oda a la poesía

18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?

Siendo referente a nivel mundial y generando cada vez más empaques de origen vegetal con muchísima más diferenciación y tecnología.

19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?

Han jugado un papel enorme. La empresa es familiar y han sido el pilar de esta idea. Nuestros amigos han aportado de manera real a ‘Mahíz’, han trabajado con nosotros y aún en la actualidad lo siguen haciendo. Creen mucho en nosotros.

20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?

Sin duda ayudaríamos a quien lo desee. De hecho, compartir nuestras vivencias es lo que más disfrutamos en este camino.

21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?

Papel fundamental, gigante, titánico, e indescriptible. Somos 70 personas entre operativos, administrativos, comerciales y gerenciales. Cada persona juega un papel clave en MAHÍZ. La idea fue de 2 personas pero sin todos ellos habría sido imposible materializarla.

22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?

Nuestra marca y logo (mazorca) hacen la diferencia y comunican de manera instantánea sobre algo que esnuevo para la sociedad. También es un gran diferencial que nuestra bolsa, por ética y promesa de venta no tiene rastros de ningún polietileno, ni metales pesados, lo que la hace totalmente compostable. Puede volver a ser tierra.

Siga esta historia: Natural, saludable y artesanal: la receta del éxito en este emprendimiento

23. ¿Qué he aprendido de todo esto?

Que es posible usar los recursos que tenemos a la mano y darle un vuelco total a lo tradicional sin dejarlo a un lado. Que somos capaces de aprovechar lo que tenemos y sabemos hacer para crear algo completamente nuevo, atrayente y diferenciador.

Si conoce historias de emprendedores y sus emprendimientos, escríbanos al correo ebohorquez@elespectador.com o tgomez@elespectador.com

Puede leer también: Emprender después de sobrevivir a la trata de personas