Fruta y verdura: cómo evitar desperdicios

Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en primavera y verano se desperdician más alimentos. Y es que el verano es un periodo especialmente crítico para la conservación de muchos alimentos, sobre todo los que no siempre se meten en la nevera, como pasa con algunas frutas y verduras. Según el MAPA, la fruta y verdura fresca son unos de los productos que más se desperdician.

Cómo conservar frutas y verduras

Si no quieres que estos alimentos acaben en la basura, hay que saber cómo conservarlos bien.

¿Qué hacer con la fruta y verdura que nos sobra?

¿Y si nos vamos de vacaciones y todavía nos quedan cosas?

Fruta y verdura: cómo evitar desperdicios

De entrada puedes hacer purés o cremas frías que luego se congelan fácilmente y podrás aprovechar en cualquier momento.

Pero también hay muchos vegetales que se pueden congelar directamente (la solución más rápida y fácil). Es cierto que la textura de estos alimentos puede verse resentida, sobre todo cuando son muy ricos en agua, pero son perfectamente utilizables para batidos y smoothies o como ingrediente en recetas de dulces, bizcochos, galletas etc.

Cuidado con las piezas mohosas

Todas estas recomendaciones son para piezas en buen estado, o tan maduras que no van a aguantar ya casi tiempo, no para frutas o verduras estropeadas. Si los vegetales se ponen mohosos en muchos casos sí habrá que tirarlos. Solo se pueden salvar las frutas "turgentes", en las que bastaría con quitar la parte mohosa y un trozo alrededor; en cambio, la carne tierna y húmeda de vegetales blandos o harinosos (tomate o pera, por ejemplo) se presta a que penetren los filamentos del micelio de los hongos, por lo que debemos desecharlos.